domingo, 22 de diciembre de 2013

Estos días fueron una porquería.

El 2 de enero me voy a ir de vacaciones con unas amigas, solas, sin padres. Y resulta que ahora que mi mama sabe toda esto de mi problema con la comida me dijo que a menos que me cure en estos días, no voy a ir. Así que estoy siendo controlada constantemente y estoy comiendo normal para hacer "buena letra" y poder irme. Allá, sin nadie que me controle, no voy a comer nada.
Pero por ahora me están engordando cual chancho para navidad.
Odio esto. Odio comer. Odio ser gorda. Odio ser yo.
Espero que me dejen un poco en paz en esta semana.
Intake de hoy: comí de todo, como el resto de mi familia.
Soy una gorda de mierda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario